Gobierno y sindicatos negocian un nuevo subsidio para desempleados de larga duración. La propuesta de esa lumbrera que tenemos en el Ministerio es:
1. Para optar a este nuevo subsidio, ha de haber transcurrido un año desde que el beneficiario agotó todas sus prestaciones de desempleo: la prestación, el subsidio, el programa Prepara (los llamados 400 €) y las tres posibles prórrogas de la renta activa de inserción.
2. El beneficiario ha de tener cargas familiares: al menos dos personas.
3. Este nuevo subsidio durará 6 meses.
4. La prestación será de entre 390 y 450 euros en función de las cargas familiares.
O lo que es lo mismo: si una familia de dos o más hijos aguanta sin morirse de hambre los periodos de subsidio, cuando ya no tiene ninguna prestación tendrá que aguantar un año sin ningún dinero y entonces tendrá derecho a 390 €.
Todo esto, si no fuera trágico, me sonaría a broma macabra de una ministra inepta e incapaz total y de un ministerio paradigmático del gobierno del PP. Que los que más tienen tengan cada vez más y los que menos tienen tengan cada vez menos. Que desaparezcan las clases medias y todo el poder para la oligarquía.
Ante esto, es imprescindible que planteemos el derecho a la Renta Básica Universal que es el derecho de todo ciudadano a percibir una cantidad periódica que cubra, al menos, las necesidades vitales sin que por ello deba contraprestación alguna.
Entre los beneficios, la Renta Básica Universal mejoraría la situación de las personas con un nivel adquisitivo bajo. Se evitaría, o al menos dificultaría, la desvalorización de nuestra capacidad de trabajo. Nadie se vería obligado a aceptar condiciones deplorables porque no estaría obligado por la necesidad. Los trabajos desagradables serían mejor pagados. Los trabajadores estarían en mejores condiciones para negociar los contratos de trabajo. No habría que “vigilar” que los parados trabajasen ilegalmente, como pasa con la ayuda por desempleo. Como no se perdería la Renta Básica Universal al encontrar trabajo, sería menos probable que se trabajase de forma ilegal; así, no se gastaría dinero en investigar el fraude. El autoempleo sería menos arriesgado y mayores sus posibilidades de aumentar. Los sueldos mayores, que también recibirían la Renta Básica Universal, estarían más gravados por impuestos directos; como resultado, el estado recuperaría el dinero que reciben dichos grandes sueldos.
Básicamente, la Renta Básica Universal va ligada al derecho a la libertad y a la dignidad de las personas. O apostamos por ella o nos sometemos a las políticas beatas de la caridad de una ministra que lo mejor que se le ocurre es apelar a las Vírgenes para solucionar los problemas.
Toni Roderic, Área de Presidencia de Los Verdes.
* Crónica agradece al autor que comparta sus opiniones con nuestros lectores
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